Lectura: “¿Cómo habla Dios? La evidencia científica de la fe”
Francis Collins, autor de este interesantísimo libro, fue durante más de diez años director del Proyecto Genoma Humano, se le concedió el premio Príncipe de Asturias a la Investigación Científica y Técnica en 2.001 y es uno de los científicos de mayor prestigio en todo el mundo. Una mente auténticamente privilegiada.
En su libro “¿Como habla Dios? La evidencia científica de la fe” nos explica como la religión y la ciencia, lejos de estar peleadas y de ser incompatibles, como muchos pretenden hacernos creer, se complementan y dibujan un cuadro de la realidad mucho más completo y coherente. Collins no huye en este libro de las grandes preguntas de la humanidad, no ignora la gran pregunta del origen primero del universo, como hace la corriente atea predominante, que evita siempre dar una explicación de la causa primera, como si ignorándola desapareciera esa pregunta trascendente. El autor explica también el gran daño que teorías pseudocientíficas como el creacionismo han hecho a la religión, y cómo la evidencia de la fe hay que buscarla en los descubrimientos científicos, escalando con ayuda de la ciencia en la montaña de un conocimiento integral, no negando nunca la evidencia científica, que puede ser empleada como argumento a favor de la existencia de una inteligencia primera en el universo. Lejos de estar peleadas, la ciencia y la religión pueden y deben convivir para poder dar respuesta a esas grandes preguntas de la humanidad. En mi opinión, una lectura recomendada para todas las conciencias.
5 comentarios:
¿Que tal anda de lenguaje? ¿Es difícil de leer?
Yo creo que es bastante sencillo, no se pierde demasiado en tecnicismos ni profundiza demasiado en genética. Y escribe de forma bastante amena. Lo suficiente para entenderlo bien sin que asuste...
El conflicto fe-razón es completamente artificial.
Estos que son tan admiradores de la antigüedad clásica son contrarios, en el fondo, a aquella filosofía clásica que siempre tenía las puertas abiertas a la trascendencia.
Pues lo voy a buscar entonces.
Nunca entendí porqué había que elegir entre ciencia o fe.
Para mí siempre estuvo clara la forma de combinar ambas, no lo veo en absoluto complicado.
Si no es un libro escandaloso le irá bien a mi padre, que, siendo médico es profundamente creyente, y no es la primera vez que alguien me pregunta con extrañeza que cómo es eso posible...
Qué manía tenemos de dicotomizarlo todo, hijos.
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